Para hacer el bien debemos desarrollar la voluntad, la conciencia y decir siempre la verdad.
Cada vez que nos esforzamos y somos constantes para conseguir lo que deseamos estamos utilizando la voluntad.
La vocecita interior que nos dice lo que está bien o mal es nuestra conciencia.
Cada vez que contamos lo que ha pasado o lo que sentimos tal como es, estamos diciendo la verdad.
Estos 3 factores nos ayudarán a llegar a hacer el bien con mayor facilidad.
La Biblia nos enseña que Dios cuando nos creo por amor nos dio inteligencia, conciencia y voluntad para poder hacer el bien, pero también nos regaló libertad para usarlos.
Dios no quiere que haya mal, desea que seamos felices. Él nos propone un camino para hacer el bien y evitar el mal.
Nosotros tenemos nuestra libertad para seguirlo o no.
El camino que Dios nos propone hacia el bien, que nos haría felices y nos alejaría del mal es el que nos invita a respetar y cuidar la naturaleza, practicar el perdón y la misericordia, utilizar nuestra libertad de forma responsable para realizar el bien y tener buenos comportamientos, participar de los sacramentos, confiar en Dios y por supuesto seguir el ejemplo de Jesús cada día.

- En la Biblia, el el libro del Génesis, podemos leer el relato de Jacob, un patriarca del pueblo de Israel que vivió 2000 años antes de nacer Jesús.
A través de su historia podemos descubrir la alegría que se siente al recibir y realizar el bien. Con Jabob y sus aventuras aprendemos como tener buenos comportamientos, a hacer el bien y a ser felices, porque la historia de Jacob nos enseña cómo encontrarnos con Dios y cómo podemos acercarnos a Él.
Responde estas preguntas sobre el texto que hemos leído sobre Jacob.